Sin ser ecológicas, las hamburguesas veganas Linda McCartney de cebolla roja son una gran alternativa a las hamburguesas de carne. Porque la carne tiene una enorme huella hídrica, es decir, requiere ingentes cantidades de agua.
En concreto, para un bistec de ternera de 300 gramos se consumen nada menos que unos 4500 litros de agua.
La hamburguesas vegana pionera
La tan esperada Beyond Burger resultó ser una imitación perfecta de la hamburguesa de carne en sabor y textura. Es cierto. Y es cierto también que pocos paladares podrán distinguirla de una hamburguesa de carne en una cata a ciegas.
Además, es una hamburguesa perfecta para la barbacoa, porque tiene una buena cantidad de grasa y no se quema así como así. Ahora bien, este es precisamente el problema. Porque la Linda McCartney es bastante más ligera en este sentido; sin salir mal parada en sabor y textura, que, de hecho, está bastante conseguido.
Y lo curioso es que esta hamburguesa vegana usa como ingredientes principales soja y cebolla. Así que con estos humildes recursos, y sin recurrir a ingredientes transgénicos, como sí hace la también vegana Impossible Burger (la hamburguesa de heme que sangra), la Linda McCartney se puede considerar una de las hamburguesas veganas pioneras: fue inventada en 1991.
Ingredientes
He aquí los ingredientes de la hamburguesa:
- Proteína de soja texturada rehidratada (56%)
- Cebolla roja (23%)
- Puré de cebolla (8%)
- Aderezo (maltodextrina, saborizante, cebolla en polvo, extracto de levadura, sal, azúcar, ácido: ácido cítrico)
- Concentrado de proteína de soja
- Harina de garbanzo
- Metilcelulosa
- Saborizante
- Puré de Tomate
- Aceite de Colza
- Extracto de cebada malteada.
Ultima actualización de precios: 2021-02-27 a las 22:08
Conclusiones
El 13 de junio de cada año se celebra el Día Mundial sin Carne. La efeméride fue propuesta por la organización World Meat Free Day. En España, la huella hídrica es de 7000 litros por persona y día.
Y si no se reduce el consumo de carne, para 2050, fecha en la que se estima que la población mundial alcance los 9000 millones de personas, la seguridad alimentaria estará en entredicho.
Por otro lado, la anterior solo es una razón más para dejar de consumir carne. La primera y más importante es de carácter ético, pues como nos recuerda el veganismo: no existe la manera humanitaria de matar al animal que no quiere morir.