COV

Según la definición del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, los compuestos orgánicos volátiles (COV) son todos aquellos hidrocarburos que se presentan en estado gasteoso a la temperatura ambiente normal o que son muy volátiles a dicha temperatura.

Existen más de mil tipos de COV. Los más comunes en el aire son: metano, tolueno, n-butano, i-pentano, etano, benceno, n-pentano, propano y etileno. Pueden penetrar en el cuerpo humano a través de la respiración o por la piel.

¿Qué son los compuestos orgánicos volátiles?

Los COV son compuestos orgánicos, es decir, sustancias químicas que contienen carbono. Los volátiles son aquellos se convierten en gas o vapor a bajas temperaturas. Estos compuestos volátiles son liberados por ciertos plásticos, pinturas y disolventes; también los emiten ciertos materiales combustibles cuando se queman (madera, carbón, gasolina, gas natural).

Un ejemplo de COV natural es el limoneno, químico extraído de la cáscara de los cítricos y responsable de su típico olor. El benceno o el formaldehído, así como la acetona, son ejemplos de compuestos orgánicos volátiles artificiales.

Además de carbono, los compuestos volátiles orgánicos pueden contener: oxígeno, flúor, cloro, bromo, azufre o nitrógeno.

¿Por qué son peligrosos los COV para la salud y el medioambiente?

Muchos de estos compuestos orgánicos son liposolubles, es decir, solubles en grasas. Esto significa que existe el riesgo de que se acumulen en los tejidos grasos del organismo.

Los COV tienen diversos efectos sobre la salud del cuerpo humano, entre otros:

• Irritación de ojos, garganta y nariz
• Náuseas y vómitos de sangre
• Dolor de cabeza y mareo
• Dolor de estómago e intestino
• Fatiga
• Manchas e inflamación en la piel
• Reacciones alérgicas

Algunos pueden producir daños a largo plazo en los riñones, el hígado o el sistema nervioso central. Los COV pueden ser, incluso, cancerígenos, como el benceno. De hecho, benceno y cloruro de vinilo son dos de los COV más peligrosos para la salud. Además, los COV también causan daños al entorno. Este puede ser severo (anilina, acetaldehído) o moderado (acetona y etanol).

¿Cómo afectan al mediambiente? El tetracloruro de carbono, por ejemplo, destruye ozono (daña la capa de ozono de la atmósfera). Por otro lado, algunos COV reaccionan con los óxidos de nitrógeno y la luz solar, y se convierten en precursores de ozono troposférico (que causa daños en el sistema respiratorio).

Algunas de las industrias que emiten estas sustancias son la farmacéutica y la cosmética. También son emisoras de COV la siderurgia, la industria maderera y las fábricas de pinturas, barnices, lacas y esmaltes.

Puedes reducir la exposición a los COV y el impacto sobre el entorno comprando pinturas y barnices con ecoetiqueta. Las etiquetas medioambientales, como la Ecolabel,  limitan la emisión de estos compuestos por parte del producto.