¿Por qué comprar pinturas con baja emisión de COV?

COV son sus siglas en castellano; VOC, en inglés. Los compuestos orgánicos volátiles son sustancias químicas con alta presión de vapor a temperatura ambiente. Pero ¿eso qué diantre significa?

Pues que tienden a evaporarse, ni más ni menos. Dicho de otra forma: los COV son químicos que fácilmente se convierten en vapor o gas. Así de simple. Y hasta aquí lo referente a volátiles. Lo que nos dice orgánicos es que estas moléculas poseen enlaces de carbono e hidrógeno. Como tantas otras ‘relacionadas con la vida’, que es lo que significa esa palabra.

Ahora bien, ¿por qué no quieres que la pintura de tu casa contenga COV? Por dos simples motivos:

1. Son contaminantes
2. Son peligrosos para tu salud.

Entre otros elementos, los COV pueden contener flúor, cloro, bromo y azufre, además de hidrógeno, oxígeno y nitrógeno.

La emisión de COV de la pintura plástica

Pintada con pintura plástica convencional, una casa empieza a emitir COV desde el momento de su aplicación. Y seguirá liberando estos compuestos durante cinco años.

Pero ¿de dónde vienen estos compuestos orgánicos volátiles? Los contienen de forma natural muchos materiales. Quemar madera o combutibles fósiles (carbon, gasolina) libera COV, por ejemplo.

Y también los contienen algunos disolventes. Por ejemplo, salvo ciertos tipos de pinturas ecológicas, las pinturas plásticas, esmaltes y barnices tradicionales llevan los COV en su fórmula.

Que una pintura emita más o menos COV depende de muchas cosas. Entre otras el color. Por ejemplo, las pinturas oscuras requieren más concentración de pigmento. En consecuencia, su emisión de COV puede ser mayor.

Riesgos para la salud de los COV

Los COV pueden ser naturales o artificiales. Se han asociado varios riesgos para la salud en los fabricados por el hombre. Por ejemplo: se han observado interacción con el sistema inmunológico en niños y bebés, así como reacciones alérgicas y problemas respiratorios.

Estos son algunos efectos sobre la salud relacionados con la exposición a los COV:

• Irritación ocular
• Irritación de la garganta y las vías respiratorias
• Sangrado de nariz
• Fatiga
• Pérdida de coordinación, náuseas y sensación de mareo
• Daño en el sistema nervioso central, el hígado y los riñones
• Cáncer, en ciertas especies animales (y posiblemente en humanos)
• Reacciones alérgicas de la piel
• Disnea
• Vómitos
• Disminución de la colinesterasa sérica

Además, compuestos volátiles como el estireno o el limoneno reaccionan con el ozono y los óxidos de nitrógeno, contaminantes típicos de las ciudades. Como resultado producen nuevos compuestos oxidativos, asociados con distintos síntomas, como la irritación sensorial.

El alcance del daño depende en buena medida del tiempo de exposición a los COV y de su nivel de concentración. Por ello, tanto en EE.UU como en Europa, se ha legislado para fijar un límite de COV en pinturas y barnices considerado seguro para la salud.

Esmaltes, barnices y pinturas plásticas son productos que pueden optar a obtener la certificación Ecolabel si el nivel de emisión de COV no supera el limite establecido. Así que vamos a ver en qué consiste esta certificación.

¿Qué es la Ecolabel?

La Ecolabel es una ecoetiqueta. No es más que un símbolo o distintivo que se añade al envase del producto, en este caso el bote de pintura. En el momento de reconocer la Ecolabel, sabemos que la pintura plástica que la luce, por ejemplo, se ha fabricado respetando varios criterios.

Entre los requisitos está un nivel bajo de COV y otros de sostenibilidad medioambiental. En otras palabras, una pintura plástica con la etiqueta Ecolabel nos asegura que es ecológica. De esta forma nos libramos de tener que indagar en la ficha técnica de la pintura o la letra pequeña del envase.

Cómo se consigue la Ecolabel

Las ecoetiquetas no son de uso obligatorio, sino voluntario. ¿Por qué iban entonces los fabricantes a certificar sus pinturas con la Ecolabel? Lo hacen con la esperanza de que compremos su producto, en detrimento de otras pinturas no ecológicas.

Es decir, la Ecolabel es una especie de premio. Las ecoetiquetas mejoran la comunicación entre la empresa y el comprador. Lo que hacen es facilitarnos las cosas. Quienquiera comprar una pintura sin tóxicos más respetuosa con el medio ambiente, solo tiene que buscar en el bote de pintura la imagen de la flor.

Ahora bien, no todas las ecoetiquetas son iguales. Pues algunas son autodeclaradas. Es decir, el fabricante puede etiquetar el producto con ellas, sin tener que acudir a un organismo independiente de certificación.

No obstante, la Ecolabel que lucen las pinturas bajas en COV es voluntaria, pero no autodeclarada.

En conclusión: fabricantes de pintura sin tóxicos o con baja emisión COV son libres para decidir si quieren obtener la etiqueta. Pero si eligen a favor, será un organismo certificador el que acredite que la pintura cumple los requisitos exigidos.

Conclusiones

Como casi siempre pasa con los productos industriales, llegamos tarde. Pero más vale tarde que nunca. Para ejemplificar esto, vamos a repasar un material por todos bien conocido: el amianto.

Los asbestos se usaron alegremente durante el siglo XX hasta la década de los 70. Es entonces cuando se empieza a sospechar de que inhalar su polvo produce cáncer de pulmón.

Sin embargo, hasta 1982 no llegan las primeras normativas sobre el amianto (de aplicación voluntaria). Los médicos recomendaron en 1984 su prohibición. Con todo, se hizo caso omiso, y España tardó 20 años más en prohibirlo definitivamente, en 2002.

Hoy casi nadie niega los efectos sobre la salud de los asbestos. Hoy los que no tomamos en serio son los disruptores hormonales, los compuestos orgánicos volátiles, el plástico…

Así que no lo dudes. Cuando vayas a pintar tu casa, elige una pintura baja en COV. En esta tabla puedes comprobar los requisitos exigidos por el sello Ecolabel. Y esta es la comisión europea que regula los criterios ecológicos de la etiqueta para pinturas y barnices.

P.D.: para proteger madera, además de lasur ecológico y barniz, puedes usar aceite de linaza.